La Plataforma contra la incineración de residuos en Los Alcores presentará un recurso de alzada contra la autorización de la Junta que permite a Portland Valderrivas incinerar residuos. Este trámite tiene un plazo de resolución de tres meses y cabe presentar un nuevo recurso contencioso- administrativo en el plazo de dos a seis meses, si el anterior no fuera favorable.
Desde el movimiento contra la incineración han querido puntualizar que «una batalla no es el fin de la guerra» y que, «sigue existiendo el mismo compromiso con nuestra ciudad y la salud de la población que hace diez años». Si bien esta resolución supone un revés evidente para el objetivo, la plataforma señala que «en absoluto pone fin a la batalla legal».
«Seguimos teniendo opciones para continuar impidiendo un proyecto de incineración que nos condena con la complicidad de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento desde febrero de 2022», manifiesta en un comunicado. Indican además que este proyecto «se ceba con toda la población de la comarca en un radio de 30 km a la redonda y cuyas consecuencias aún pueden ser peores, ya que el consistorio pretende construir miles de viviendas en la zona del Zacatín, donde estaba prevista además una zona verde que ahora desaparece y que resulta vital para sus vecinos dada la proximidad de puntos ya altamente contaminantes a los que se uniría el cambio de actividad a peor de la empresa, convertida en incineradora».
La Plataforma gana tiempo
La Plataforma recuerda que para obtener una sentencia firme al contencioso que el grupo ecologista Alwadai-ira puso contra la cementera fueron necesarios casi cuatro años de tramitación» por lo que «aún podría tardar en hacerse realidad el proyecto de incineración que persigue Portland Valderrivas». En este sentido, para la Plataforma resulta «muy aventurado» afirmar que se trata de una derrota «definitiva» e «inminente».
La autorización para incinerar ha estado supeditada a la instalación y funcionamiento de una estación de control de calidad de aire durante un año antes. «Esto hubiese sido algo impensable sin la lucha de esta Plataforma», señala, aunque «los datos de estas mediciones, en teoría obligatoriamente públicos, hasta el momento han resultado inaccesibles para su consulta».
Calidad del aire
Los datos de calidad del aire que maneja la plataforma en tiempo real extraídos de su medidor de PM2.5 perteneciente a la red internacional de medidores PURPLEAIR instalado en La Liebre, no son «nada tranquilizadores». «La actual calidad de aire de la zona no es ni mínimamente aceptable», lamenta.
«La contaminación mata y eso es algo que ya nadie discute. Pero incluso si finalmente la traición de nuestros gobernantes permitieran la implantación de este atropello contra el que llevamos luchando una década, ni un solo segundo de nuestra lucha habrá sido en vano porque hemos conseguido impedir la incineración durante todos estos años con todos los beneficios que eso implica», recuerda la plataforma, añadiendo que «hemos creado conciencia sobre el problema que ha sido respaldada ampliamente en varias campañas de recogidas de firmas, hemos dado la posibilidad de saber qué aire respiramos con la instalación del medidor, hemos forzado a la implantación de mejoras en el proyecto de incineración de la propia fábrica para que, de llevarse a cabo, se realicen con mayores garantías de seguridad a través de las numerosas alegaciones que hemos presentado al proyecto».
Aseguran que «la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento y las cementeras pueden tratar de manipularnos sobre la legalidad y la buena opción que es incinerar para gestionar residuos, pero la verdad es que atentan contra nuestros derechos», concluyen.