Tuve la suerte de nacer en el seno de una familia donde el trato era igualitario, de hecho yo desconocía que las mujeres tuviéramos menos derechos que los hombres. Con la declaración por Naciones Unidas del Año Internacional de la Mujer en 1975 descubrí que no todos éramos iguales. Y en España menos, el régimen aún discriminaba más a las mujeres que en otras sociedades democráticas.
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