El todavía ocupante de La Moncloa, hoy convertido en actor, me trae a la memoria una frase chusca –cierta o no– referida R. Reagan: «Que un mal actor puede ser un buen presidente». La frase aplicable al monclovita sería que un pésimo presidente puede ser detestable como actor.
CONTENIDO EXCLUSIVO
Hazte socio por sólo 3 euros al mes. Si eres socio y aún no tienes claves pídelas a socios@lavozdealcala.com.
Si ya eres socio inicia sesión