Publicado enLa otra orilla

¡Vente a Alemania, Pepe!

El ser humano nunca deja de sorprenderme. Muchos son capaces de empatizar hasta niveles insospechados, ser solidarios y generar unas redes de ayuda mutua increíbles, mientras que otros se han especializado en generar un odio que, para desgracia del resto, se propaga cual virus por donde encuentra un resquicio de miedo y desconocimiento. Tener algunas […]