Este jueves se ha celebrado la reunión de la Mesa General de Negociación Común, en la que el gobierno presentó su plan para la incorporación progresiva de los empleados municipales. Ni los sindicatos ni los grupos de la oposición han aprobado este borrador.
Han votado en contra, según ha comunicado CCOO, «porque sólo quieren hablar de la incorporación al trabajo presencial de quienes están en teletrabajo, ignorando a todos empleados que están sin evaluación de riesgos». El sindicato exige un acuerdo que amplíe a todos los empleados municipales. Además, «están obligando a trabajar presencialmente a empleados sin Evaluación de Riesgos por Covid-19, sin las medidas de protección individuales y colectiva que se determinen en el Plan de Actuación, y sin formación adecuada sobre Covid-19″, por lo que exige que «se cumplan las leyes de prevención de riesgos».
Además, según CCOO, «no quiere comprometerse en asegurar a los empleados municipales con hijos menores de 14 años o personas mayores a su cargo, que en ningún caso los tendrán que dejar desasistidos para realizar trabajo presencial, asignándoles teletrabajo si es posible, y si no lo fuera permiso”, por lo que piden asegurar la conciliación familiar mediante permiso retribuido por deber inexcusable. Además, este sindicato ha criticado que no quieren «comprometerse a hacer test a los empleados municipales», por lo que exigen que se realicen los 150 test contratados con MPE-SUR, a los empleados de servicios esenciales en los próximos siete días y posteriormente, de forma progresiva al resto.
Entre otros motivos, tampoco se comprometen «con la formación de los trabajadores frente al Covid-19», así como «a la creación del Servio de Prevención Propio» y «con una Comisión de Seguimiento de estos compromisos.
UGT también ha sido crítica con la gestión del gobierno en la vuelta al trabajo de la plantilla municipal. «Ya hay servicios en los que se ha acordado la incorporación presencial de los trabajadores directamente con sus responsables estando previsto para el próximo día 1 de junio.
«Cuando se ha pedido que los representantes debemos estar en esas negociaciones la delegada ha respondido que no, que ya nos trasladarían la información y pondrán en nuestro conocimiento en caso de que surja algún problema. Nos parece una actitud neoliberal y aberrante y más viniendo de una concejal socialista».
El plan, según UGT, es «ambiguo y le falta de concreción, y por no garantizar, de una parte, el debido cumplimiento de las exigencias en materia de prevención de riesgos y de otra, la negociación con los representantes de los trabajadores».
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