Bancos mirando a la pared en la ladera norte. Enrique Sánchez

Las obras de reurbanización de la ladera norte del Castillo iban a suponer, según el gobierno municipal, «una nueva puerta hacia el recinto fortificado desde la calle Orellana, con zonas ajardinadas, nueva iluminación y unas singulares vistas sobre el propio Castillo y las riberas del Guadaíra», además de «un atractivo turístico». Los vecinos de las vías de acceso peatonal, que también se han reurbanizado, tienen otro concepto distinto del resultado final, como apunta a esta redacción un socio y lector.

CONTENIDO EXCLUSIVO

Hazte socio. Si ya lo eres y aún no tienes claves pídelas a socios@lavozdealcala.com

Si ya eres socio inicia sesión

Director de La Voz de Alcalá desde 2000. Fotoperiodista de la Agencia EFE y diversos medios como ABC, El Correo de Andalucía y la revista Triunfo.