En el año 2005 se daba vía libre a la expropiación de varias casas de la calle Orellana. En el presente año, la situación de dichas casas no ha variado. Las expropiaciones nos han costado más de 1,5 millones. Además, deja un acerado intransitable. Un nuevo despilfarro de dinero de los ciudadanos. Para colmo, una de las casas está ocupada. Suma y sigue. 

CONTENIDO EXCLUSIVO

Hazte socio. Si ya lo eres y aún no tienes claves pídelas a socios@lavozdealcala.com

Si ya eres socio inicia sesión