Hablando con Francisco Vals Recacha, Paco, nacido en 1940, me hizo caer en la cuenta de estar delante del último maestro de dos actividades muy pujante en Alcalá hace tan sólo unas décadas, hoy completamente desaparecidas: la tonelería y el aderezo de aceitunas.
La primera no le llegó a Paco por tradición familiar. Bernardino Vals Estepa, abuelo de Paco, fue un melero. Francisco Vals Hornillo, su padre, nacido en 1903, trabajando en el almacén de Pedro Gutiérrez se inició en el gremio de la tonelería. Allí dio sus primeros martillazos y coincidió con su primo José Vals Valencia.
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