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La redacción de La Voz de Alcalá ha acogido la presentación del libro de cuentos Cuentos que nunca se acaban, de Lucrecia Romero. La autora es colaboradora habitual del periódico y firma cada mes la columna El Zaguán.
El acto fue presentado por Francisco Amador, director de La Voz de Alcalá. Durante la presentación, tuvo lugar la lectura de varios cuentos incluidos en la obra, a cargo del hijo de la autora, José Carlos Roldán, y su amiga, Mari Carmen López. Entre el público asistente destacaba la presencia de muchas abuelas acompañadas de sus nietos y nietas. Romero, además, estuvo firmando libros a los asistentes.
Vivencias
La lectura de cuentos dio paso a un coloquio con la autora, en el que compartió el proceso de edición del libro y sus experiencias como docente, como madre y, ahora también, como abuela. Desde esas vivencias explicó su forma de acercarse a los cuentos, entendidos como vehículo de afecto, transmisión y escucha.
Cuentos que nunca se acaban parte de una evocación íntima y entrañable: «Por la noche, antes de irnos a dormir, mis padres nos contaban cuentos que habían oído de sus padres y de sus abuelos». A partir de ahí, Lucrecia Romero ofrece una colección de historias reales e inventadas, divertidas y sentidas, que invitan a reconfortarse con las palabras. «Hoy, todas las personas necesitamos sentirnos reconfortadas por las palabras. Por eso nos gusta tanto escuchar y leer historias y cuentos. ¿Quieres que te cuente un cuento que nunca se acaba?».
Una redacción abierta
Con esta actividad, la redacción del periódico abre su espacio a la cultura y a la literatura, reforzando su compromiso con la vida cultural de la ciudad. En el acto se puso en valor la apuesta de La Voz de Alcalá por la cultura y por la visibilización del talento creativo de sus colaboradores. Lucrecia Romero agradeció al periódico la oportunidad de presentar el libro en el periódico, que es su casa, y animó a los asistentes a participar de la edición del periódico con la suscripción para mantener viva la prensa independiente en Alcalá.