El avance de las obras de la Parroquia de San Agustín, y su culminación antes de la Semana Santa, se habían convertido en una de las grandes incógnitas de la Cuaresma. Pero ahora, cuando queda menos de un mes para el Domingo de Ramos, desde la Hermandad de la Borriquita se confirma que finalmente la cofradía podrá hacer su estación de penitencia desde su sede canónica.
Esta noticia responde a un hecho clave: Las obras quedarán paralizadas en los días previos al Domingo de Pasión, esto es, una semana antes del Domingo de Ramos. Esto posibilitará que la cofradía realice su salida con normalidad, aunque sí se verá afectada en su desarrollo durante las vísperas. Lo apretado de las fechas obligará a la corporación a montar el paso de palio en un lugar alternativo, siendo la opción principal la sede de la Cabalgata de Reyes Magos de Alcalá, en el barrio de Nueva Alcalá, en lugar de hacerlo directamente en la parroquia como era habitual.
El Resucitado no procesionará este año
Las vicisitudes que han acontecido en la Parroquia de San Agustín en los últimos meses han afectado también a otro de los grupos parroquiales que allí reside, el de los Fieles de Cristo Resucitado, cuya junta de gobierno suspendió la salida procesional de cara a la próxima Semana Santa.
Este grupo de devotos se han encontrado dos graves problemas de cara a la presente Cuaresma. Uno, económico: la profunda restauración a la que ha tenido que someterse la talla de Gabriel Cuadrado ha mermado la economía de la corporación. Además, a ello habría que sumarle que la clausura del templo parroquial ha imposibilita- do que la Cuaresma se desarrolle con normalidad, en cuanto a la celebración de ensayos o al montaje del paso, un hecho que para este humilde grupo ha supuesto un escollo difícil de salvar.