El deterioro y abandono de Villa Esperanza es tal, que a la basura y los daños que está sufriendo la edificación, se ha sumado la presencia de animales en su interior, concretamente un poni. Según el documento gráfico conseguido por La Voz de Alcalá, se demuestra la presencia del animal.

La Policía Local, atendiendo a las llamadas de los vecinos de la zona, se ha desplazado para intentar rescatar al animal. Pese a que el edificio es de propiedad municipal, los agentes no han accedido a su interior al considerarlo de propiedad privada por estar ocupado desde varios meses.

El edificio, que no cuenta con protección municipal como ya publicó este periódico, se encuentra en estado de abandono, con una acumulación de basura y restos orgánicos importantes. Así lo ha denunciado hoy la Plataforma por la Recuperación de Patrimonio Histórico del Centro de Alcalá. En este sentido, han denunciado que «una vez más, ante el silencio de nuestros dirigentes, volvemos a denunciar que la situación no ha cambiado sino empeorado, que las elecciones han pasado, que no hay presencia policial ninguna en la zona y que al Ayuntamiento ante esta situación ni se le ve ni se le espera»

Villa Esperanza es un edificio patrimonial de propiedad municipal desde 1985 y actualmente se encuentra sin protección estructural en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), donde no aparece catalogada. Este inmueble gana ahora especial relevancia, después de que una investigación de Rocío Paneque Sánchez-Toscano, publicada en la revista de la Real Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría, le atribuyese la autoría al reconocido arquitecto regionalista Juan Talavera y Heredia, autor entre otras obras del Hotel Oromana, el Teatro Gutiérrez de Alba o el Cuartel de la Guardia Civil de la plaza del Derribo.

Villa Esperanza llegó a albergar una guardería municipal pero desde hace años está abandonada, sufriendo actos vandálicos, expolios y ocupaciones ilegales, además de modificaciones que afectan a la estética del edificio como el tapiado de los arcos que conforman la galería y que estarían totalmente prohibidos si el edificio tuviera una protección estructural en la normativa municipal. Sin embargo, Villa Esperanza se encuentra en una situación de vulnerabilidad ante estos ataques, ya que no está amparada por ninguna norma que penalice su deterioro y destrucción. El Ayuntamiento como propietario del inmueble ha tenido una actitud permisiva desde hace años ante la degradación de la vivienda, construida entre 1926 y 1927 por encargo del empresario sevillano Manuel Aguilar Luque.

Licenciado en Periodismo. Actualmente La Voz de Alcalá, Sevilla Actualidad y En Andaluz. Antes en Localia TV y El Correo de Andalucía.

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