Un deslizamiento de tierra en la ladera sur del Castillo ha provocado que se haya caído varias almenas del Castillo. Según Patrimonio, «los servicios técnicos municipales han inspeccionado la zona apreciando un deslizamiento de parte del talud, que ha afectado a un tramo lineal recrecido del almenado, que sustituía al histórico». Esa intervención finales del siglo XX o iniciales del XXI, realizada por «seguridad de los visitantes» y con materiales «contemporáneos como ladrillo y hormigón».
El incidente se ha registrado en el sector sur durante la mañana de este 16 de octubre. Se apunta principalmente a la acumulación e infiltración de agua provocadas por las lluvias de los últimos días. Desde ayer se han registrado 41 litros por metro cuadrado, tras un acumulado superior a 125 l/m² en los anteriores seis días. El Ayuntamiento ha anunciado trabajos de emergencia en el Castillo e insiste en que «no existe ningún daño a elementos históricos del monumento». No obstante, la valoración patrimonial definitiva tendrá que esperar al estudio arqueológico.
La zona del deslizamiento ha quedado protegida y el Ayuntamiento ha subrayado en un comunicado que «se está trabajando en un proyecto completo de intervención en la muralla sur, conscientes del estado precario de algunos tramos de este sector, desde hace años. Esto se hará con el preceptivo estudio arqueológico previo, y cumpliendo todos los plazos que establece la Ley de Patrimonio Histórico», ha concluido.