El pleno de febrero del Ayuntamiento de Alcalá abordó varios asuntos en materia de urbanismo, entre los que destacó el cambio de uso del edificio que acogía el antiguo mercado de abastos, para trasladar allí las oficinas de atención a la ciudadanía.
Así lo expresó el gobierno municipal durante la sesión, y fue valorado por la teniente de alcalde, Ángeles Ballesteros, en la rueda de prensa posterior. «No podemos permitir que un edificio público siga con sus puertas cerradas», justificó. De esta forma, «logramos que toda la zona de la calle Gestoso y Rafael Castaño se considere como una zona de uso administrativo».
La edil explicó que, tras tantear varias propuestas privadas relacionadas con la hostelería, y viendo que «no ha habido iniciativas interesadas», se ha aplicado esta fórmula para que un edificio como el que albergaba el mercado de abastos no quede abandonado. Así, el edificio pasa de tener un uso de ‘Equipamiento Servicios Urbanos’ a ‘Equipamiento Público-Administrativo’.