El volcán de Cumbre Vieja de la isla tinerfeña de La Palma ha vuelto a expulsar lava y piroclastos en la mañana de este lunes tras parar repentinamente su actividad. El volcán ha vuelto a su actividad tras ‘dormirse poco después de las 8:30 horas de la mañana.
Esto ocurre tras ocho días de erupción, desde el pasado domingo 19 de septiembre, aunque no es la primera vez que el volcán experimenta estos intervalos de inactividad. La nube de humo y cenizas que expulsaba se ha disipado, tal y como se aprecia desde el puerto de Tazacorte.
El propio INVOLCAN anunciaba en sus redes sociales este descenso de la actividad del volcán. «En las ultimas horas el tremor volcánico ha casi desaparecido, así como la actividad explosiva estromboliana», anuncian. Horas más tarde, confirmaban que el cono volvía a su actividad.
Esto se produce tras el aviso por parte del Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca) de que la llegada de la colada de lava a la costa es inminente, con el riesgo que supone para la población de las localidades cercanas por los gases nocivos para la salud que provoca la entrada en contacto de la lava con el agua saldad.
Actualmente la lava que expulsa el volcán de La Palma se encuentra a poco más de kilómetro y medio para entrar en contacto con el Océano Atlántico.