La otra noche coincidí con un buen amigo junto a mi casa. Después de saludarnos se terció una conversación sobre las personas que critican las obras que se están realizando en Alcalá.
Contenido exclusivo para socios. Hazte socio por sólo 3 euros al mes. Si eres socio y aún no tienes tus claves pídelas a socios@lavozdealcala.com.
Entrar
Criticar hay que criticar, por principio. Críticas justas, fundadas y razonadas sean correctas o equivocadas. Es sano disentir de los gobernantes. Sólo no se disiente ni se critica en los regímenes totalitarios. Y yo en Alcalá estoy viendo muchos que atacan al que critica las decisiones y actuaciones del consistorio escudándose en que no es sano tanta crítica, que debajo esconde una malévola intención. Poco más o menos es lo que hacían con el protagonista de Un Mundo Feliz, cuando se negaba a tomarse su dosis de soma y a abandonarse a la “felicidad”