Un socio nos envía esta fotografía tomada a la altura del número 48 de la calle Sor Petra, donde se aprecia el acerado cubierto de escombros. Así lleva un año, obligando a los peatones a circular por el acerado de enfrente. Seguramente que los responsables de los servicios urbanos municipales no se habrán dado cuenta. Tampoco el gerente de dichos servicios, que cobra una pasta del contribuyente, habrá pasado por la calle. La incompetencia es manifiesta. La tolerancia, también. Los ciudadanos pagamos nuestros impuestos para consentir estos atropellos y tropelías. ¿Cuánto tiempo durará?

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