La calle Nuestra Señora del Águila es el paradigma de ciudad inteligente que el gobierno municipal quiere extender por toda Alcalá. Llama la atención cómo los modernos alcorques que se construyeron para los árboles de la calle cuentan con un embellecedor metálico y una luz LED decorativa. El árbol se perdió y se retiró, pero ahí sigue la luz iluminando el vacío. El alcorque ya no cumple su función y se ha convertido en un cenicero de última generación y en un pipicán a la vez. El alcorque se encuentra entre el abandono y el incivismo.
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