Aparcamientos de bicicletas y patinetes en el Auditorio Riberas del Guadaíra. Marina Ortiz

En enero de 2024 comenzaron a instalarse los aparcamientos seguros para bicicletas y patinetes en distintos puntos de la ciudad como la biblioteca municipal Editor José Manuel Lara, el complejo deportivo San Juan y el teatro Auditorio Riberas del Guadaíra, y casi dos años después continúan fuera de servicio. Nunca han entrado en funcionamiento y tuvieron un coste de 150.000 euros, según consta en el anuncio de adjudicación a la empresa Servicios Urbanos Avanzados SL y con cargo al superávit municipal de 2022.

Además, estos aparcamientos también se colocaron frente a la Casa de la Cultura como parte de una mejora en el contrato de reurbanización del bulevar de la carretera de Dos Hermanas a su paso por La Nocla y, más recientemente, en los nuevos aparcamientos para vehículos que se han construido en Pablo VI. Igualmente, ninguno de ellos ha entrado en funcionamiento.

Este proyecto viene coleando desde el mandato anterior. En concreto, fue el delegado de Servicios Urbanos, José Antonio Montero, el que inició los trámites del proyecto y la contratación del suministro de los aparcamientos. En agosto de 2023, ya pasadas las elecciones y con el gobierno de coalición de PSOE y AxSí recién constituido, el Ayuntamiento anunció en un comunicado que «tenía adelantado el proyecto de movilidad sostenible y fomento del ‘ciclo-turismo’ con la aprobación de los pliegos de condiciones administrativas y técnicas para dicho contrato de esta iniciativa» en coordinación con el Plan Municipal de Movilidad Urbana Sostenible e integrado en el proyecto Alcalá de Guadaíra (ADG) Smart City, que permitiría la creación de software tanto para la información de los usuarios como para la seguridad, monitorización y registros de estas dotaciones.

«Facilitar la movilidad»

La alcaldesa de Alcalá de Guadaíra, Ana Isabel Jiménez, aseguró entonces que «con esta iniciativa cumplía con otro de los objetivos que se propusieron en el nuevo modelo de ciudad, sobre todo en la línea de facilitar la movilidad sostenible». Lo cierto es que, más de dos años después de estas declaraciones, los aparcamientos no funcionan. David Delgado, delegado de Hábitat Urbano que sustituyó a Montero en sus funciones, aseguró que «este sistema iba a dar respuesta a las necesidades en el campo de la micromovilidad aprovechando las nuevas tecnologías, al igual que optimiza el espacio público, incrementa la seguridad y se fundamenta en la sencillez de manejo para los usuarios».

Consultado por La Voz de Alcalá, Delgado ha explicado que han estado un tiempo realizando las conexiones eléctricas y de internet. Estos trabajos llevan unos meses terminados y «estamos esperando a inaugurar el aparcamiento de Pablo VI y pondremos en marcha todos los aparcamientos que tenemos en Alcalá de bicicletas». No obstante, no hay una fecha concreta y afirma que «no se tardará muchos meses en que estén en funcionamiento tanto el aparcamiento de coches como todos los aparcamientos de bicicletas».

Totalmente cerrados

El pliego técnico indica que los módulos serán totalmente cerrados, de 6 x 2,5 metros, e incluirán diez espacios totalmente independientes para mayor privacidad. Éstos estarán dotados de carriles y anclajes para candar las ruedas, permitiendo una mayor estabilidad y evitando los roces laterales. Además, vendrán provistos con taquillas dotadas de sistemas de apertura electrónica para cascos y/o enseres personales con todas las garantías de seguridad, con sistemas eléctricos, puntos de recarga e iluminación LED que facilite el uso de la instalación en horario nocturno.

Aparcamientos con app

De hecho, la propuesta es que estén disponibles 24 horas al día los 365 días del año. Para ello se ha previsto la creación de una app gratuita accesible desde cualquier dispositivo móvil con información que va desde la consulta de disponibilidad, alquiler o bonos de uso, altas o bajas del servicio, historial de utilización, explicaciones del funcionamiento y normas de uso, mapas de aparcamientos seguros e información en tiempo real de las condiciones de cada uno, etcétera.

Dicha tecnología servirá al municipio igualmente para monitorear condiciones, usos y sistemas de control de acceso y seguridad que faciliten tanto la garantía y comodidad de uso de los usuarios como la información general del funcionamiento de la instalación.
Los módulos tendrán sistemas antivandálicos y antirrobo, preparados para condiciones climatológicas adversas, fácilmente instalables y desmontables aunque con seguridad en el anclaje, con puertas automatizadas, circuito cerrado de televisión, botón de alarma para usuarios y sistemas redundantes que garanticen la operatividad del servicio, entre otras cuestiones tecnológicas y de certificación.