Declaraciones del grupo político / Izquierda Alcalareña
Declaraciones del grupo político / Izquierda Alcalareña

Izquierda Alcalareña alerta de que el Proyecto de Presupuesto General del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra para el ejercicio 2026 supone un incremento de deuda de carácter preocupante, que podría poner en riesgo la estabilidad financiera del municipio. La formación señala que los presupuestos, aprobados por el equipo de gobierno, con Andalucía por Sí (AxSí), mantienen una línea que el propio partido criticaba cuando estaba en la oposición en mandatos anteriores.

Según el análisis realizado por Izquierda Alcalareña, el presupuesto pasa de 128,4 millones en 2025 a 151,5 millones en 2026, lo que provoca que la deuda viva aumente de 39,1 millones a 44,4 millones de euros, alcanzando un 40,8 %. La organización advierte de que se trata de “un incremento bestial y evitable, que compromete la sostenibilidad financiera futura”.

Asimismo, el grupo municipal subraya que, pese al incremento del gasto y de la deuda, el Ayuntamiento no ha propuesto bonificaciones ni medidas fiscales que alivien la carga de las familias, especialmente de las más vulnerables. “Teniendo superávit y remanente del ejercicio anterior, es incomprensible que no se apliquen políticas fiscales progresivas, tal y como marca el artículo 31 de la Constitución”, señalan.

Descenso del ahorro neto

Izquierda Alcalareña también muestra preocupación por el descenso del ahorro neto, el creciente gracias al endeudamiento para financiar inversiones y el riesgo de incumplimiento de la regla de gasto, especialmente en relación con la situación de la empresa municipal de vivienda VIVE y su presupuesto de 12,8 millones de euros.

Otro de los puntos críticos destacados es la falta de transparencia y participación ciudadana en la elaboración del presupuesto, repitiendo el patrón de ejercicios anteriores. A ello se suma que el informe preceptivo del Consejo Económico y Social (CES) se emitió después de que el presupuesto fuese aprobado, lo que, según la formación, “desvirtúa su función consultiva y reduce la calidad democrática del proceso”.

Rubén Ballesteros: con  el aumento  de endeudamiento aumentan los costes en intereses que supone menos dinero de los alcalareños para las cosas importantes. Además nos resulta altamente preocupante la inoperativa acción de la oposición en  el consistorio que no han presentado enmiendas ni propuestas de cara a este presupuesto, priorizando el ruido y el teatro, a de verdad presentar una alternativa, aun sabiendo la imposibilidad de que fueran aprobadas o asumidas por el equipo de gobierno. Sería una forma de demostrar la soberbia y prepotencia de la coalición gobernante.

Pese a reconocer que el documento presupuestario cumple con la normativa y que el Ayuntamiento dispone de un remanente de tesorería positivo, Izquierda Alcalareña insiste en que los presupuestos para 2026 “dependen en exceso de ingresos no estructurales, aumentan el gasto sin equilibrar adecuadamente los ingresos corrientes y dejan al municipio más endeudado y con menos margen de maniobra”.

La organización concluye reclamando “responsabilidad, transparencia y planificación a largo plazo” al equipo de gobierno para garantizar una gestión municipal eficiente y sostenible.