La alcaldesa de la ciudad, Ana Isabel Jiménez, acompañada del delegado de Hábitat Urbano, David Delgado, el arquitecto del proyecto, Manuel Navarro y el responsable de Emasesa, José Marín, ha presentado el proyecto de reurbanización de la calle Malasmañas que tiene como objetivo transformar esta calle en un espacio urbano más habitable, inclusivo y orientado al futuro.
Las obras se desarrollarán de forma coordinada con Emasesa, con un plazo de duración de 12 meses, en tres fases y con un presupuesto de 2.835.794 euros. Comenzarán el próximo martes día 18 de noviembre con la primera fase. Una intervención que afectará principalmente al tramo comprendido entre la plaza de la Industria hasta la calle Diego López de Haro. La segunda fase comprendería desde la calle Diego López de Haro hasta Joaquín Hazañas, y la tercera, desde Joaquín Hazañas hasta su confluencia con la calle Esteban Domíguez.
La alcaldesa, Ana Isabel Jiménez, ha explicado que «se trata de una de las vías más conocidas de la ciudad sobre la que, por antigüedad, desgaste y diseño obsoleto, se hace necesaria la transformación para aumentar los servicios y propiciar un lugar más adecuado para los vecinos y comerciantes de la zona».
Ana Isabel Jiménez ha recordado que con este proyecto la calle «cambiará su estética, con arbolado y vegetación, iluminación con tecnología led y nuevo mobiliario. Será un lugar más amable para el encuentro ciudadano. Buscamos fomentar el uso de medios de transporte no motorizados y mejorar la accesibilidad peatonal, para ello, la nueva calle dispondrá de aceras más amplias y las zonas peatonales serán más seguras».
Además, «la nueva infraestructura hidráulica, con un nuevo colector de saneamiento con mayor capacidad, reforzará aún más la seguridad de nuestro casco urbano en época de fuertes lluvias».
El proyecto contempla una avenida más cómoda para el peatón, con la necesaria inclusión de arbolado inexistente en la actualidad, y que proporcionará sombra, con la reforma y modernización completa de la iluminación y el mobiliario urbano, y una adecuada reordenación del tráfico y de los aparcamientos, sin pérdida de ninguna plaza.
Por su parte, el delegado municipal de Hábitat Urbano, David Delgado, ha explicado «que la intervención contempla una profunda operación de redes de abastecimiento y saneamiento muy necesaria en la zona, pero que la parte más visible estará en la superficie».
La sustitución y mejora de redes es responsabilidad de la compañía pública de aguas, y tiene un presupuesto algo superior al millón de euros. La remodelación sostenible del paisaje urbano, con inclusión de iniciativas medioambientales y tecnológicas, las desarrollará el Ayuntamiento a través del programa de cooperación de la Diputación Provincial Plan Más Sevilla.
En cuanto al tráfico, y el itinerario de las líneas de autobuses, se adaptarán a nuevos recorridos. Durante el plazo de ejecución de la obra tendrán itinerarios modificados. Desde el Consistorio se pide precaución y prestar atención a la señalización provisional que se colocará en toda la zona afectada.


