La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha visitado hoy las obras. - Coral Gata

La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha visitado este martes las obras del tranvía de Alcalá, que avanzan con la estructura del edificio principal de talleres y cocheras prácticamente terminado y con los trabajos de estructura, albañilería y cerramientos de las estaciones. Ha remarcado que los ritmos de obras permitirán que los primeros trenes de la flota del tranvía lleguen «a Alcalá de Guadaíra en el primer semestre de 2026».

Los seis trenes del modelo Urbos-100, que se encuentran en la fase final de fabricación en la factoría de CAF, contarán con más de 200 plazas cada uno, con cinco módulos y dos cabinas de conducción. La titular de Fomento ha subrayado que los trabajos que se están realizando «completarán todo lo que queda pendiente para su puesta en marcha», como la electrificación, la señalización, las comunicaciones y videovigilancia, las marquesinas de las paradas, el acabado de las estaciones y el recinto de talleres y cocheras.

En este lugar, la consejera ha explicado que está prácticamente terminada la estructura de la nave principal y el edificio de oficinas y se está trabajando en la cubierta. También está visible el lugar donde irán los viales y vías dentro de la parcela, que se empezarán a montar, si se mantienen los plazos previstos, a finales de este año.  

Igualmente, la Consejería de Fomento avanza en los acabados de las estaciones e instalaciones ferroviarias, con un alto grado de ejecución en albañilería y cerramiento en estaciones como El Canal, Parque Tecnológico 1 y 2, La Red o Venta La Liebre. De igual manera, se han terminado las estructuras de marquesinas en las paradas situadas en el casco urbano del municipio, al igual que se están ejecutando las subestaciones que suministrarán energía al tranvía. En paralelo, se realizan trabajos menos visibles como los de sistemas ferroviarios y electrificación.

El resultado final de estas obras será la conexión de más de 12 kilómetros entre Montecarmelo, en Alcalá de Guadaíra, y la Universidad Pablo de Olavide que va a enlazar con la Línea 1 de Metro de Sevilla. La demanda inicial será de algo más de dos millones de pasajeros al año. La puesta en funcionamiento del tranvía supondrá que más de 2.500 personas dejen de usar el coche solo el primer año de funcionamiento y 2.100 toneladas de CO2 menos en emisiones. Así, beneficiará tanto a los vecinos de Alcalá de Guadaíra como a los trabajadores de las empresas de los polígonos y los estudiantes de la Universidad Pablo de Olavide.