temperaturas Alcalá.
Parque Centro. F.A.

Nueva ola de calor en la provincia. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), Alcalá afronta una semana marcada por el calor extremo, la ausencia total de lluvias y unos índices ultravioleta muy elevados, por lo que se recomienda extremar las precauciones.

Desde el lunes 14 hasta el sábado 19 de julio, los termómetros se mantendrán por encima de los 33 grados de máxima y no bajarán de los 21 °C de mínima en prácticamente ningún momento. Las jornadas más críticas serán el miércoles 16 y el jueves 17, cuando se esperan máximas de 40 y 42 grados, respectivamente. El martes también será muy cálido, con una máxima prevista de 41 grados.

Radiación UV y noches tropicales

Además del calor diurno, Sevilla vivirá noches tropicales, especialmente entre el lunes y el viernes, con mínimas que oscilan entre los 22 y los 23 grados. Esto dificultará el descanso nocturno, sobre todo en zonas urbanas sin climatización.

El índice ultravioleta (UV) se situará en niveles muy altos (9-10) durante toda la semana, lo que aumenta el riesgo de quemaduras solares. Se recomienda evitar la exposición directa al sol entre las 12:00 y las 17:00 horas, así como usar protección solar, gafas, sombrero y ropa ligera de manga larga.

El viento soplará desde componente sur y sureste con velocidades de entre 5 y 15 km/h, sin previsión de episodios de viento intenso. La Campiña sevillana mantiene activados avisos preventivos por temperaturas máximas, especialmente en el tramo central de la semana, donde se alcanzarán los valores más altos.

Un verano sin descanso térmico

La estabilidad atmosférica marcará toda la semana, sin lluvias a la vista y con un sol radiante durante todas las franjas horarias. Aunque el sábado 19 se prevé un leve descenso de temperaturas (hasta 34 °C de máxima), el calor volverá con fuerza en días posteriores, según las proyecciones a medio plazo.

Sevilla encara así una nueva semana de verano riguroso, con altas temperaturas y sin alivio térmico, en plena canícula. La hidratación, la sombra y la prevención vuelven a ser aliados imprescindibles.

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