Publicado enEl Ágora

Muertes invisibles

Hablaba el otro día con mi madre cuando me contó con bastante pena que M, una amiga suya, había muerto. Para usted, estimado lector, más allá de una pérdida humana de alguien desconocido, esto no tiene nada de extraordinario: era una mujer de algo más de 60 años, una muerte más de las más de […]