La inmensa mayoría de los vecinos de los Pinares de Oromana, al igual que la inmensa mayoría de los alcalareños, somos gente pacífica, que nos gusta relacionarnos entre nosotros, desde la amabilidad, la educación y el buen rollo. Eso no es óbice para que, cuando algún derecho se ve conculcado, muchos seamos tremendamente reivindicativos y los defendamos con toda la contundencia que requiera, pero insisto, desde la tranquilidad y desde la razón, que es justo lo que nos da la fuerza.

Viene esto a cuento porque se está desarrollando una tremenda campaña basada en mensajes de «odio» como elemento central, que ni yo ni la inmensa mayoría de los vecinos ni de esta urbanización, ni de Alcalá de Guadaíra, compartimos.

Son una minoría muy activa que además están utilizando el nombre y los recursos de una Asociación que se creó y existe para defender, por supuesto con toda la intensidad del mundo, el derecho que nos asiste a tener un nivel de servicios públicos y de infraestructuras semejante a cualquier otra barriada o urbanización de Alcalá de Guadaíra, pero que no suscribe en absoluto los mensajes de odio que se están difundiendo en nombre de todo Pinares. Ni siquiera en nombre de la mayoría de los miembros de la asociación, que permanecen callados e indignados por esta actitud de algunos vecinos.

Por eso desde aquí, en mi nombre, y creo que en el nombre de una enorme cantidad de vecinos que se están dirigiendo a mí en privado, denuncio esta campaña y digo que no la suscribimos y nos parece totalmente impresentable y fuera de lugar, y cuya única explicación es la proximidad de unos elecciones municipales, que si bien es una ocasión idónea para exigir compromisos con las distintas fuerzas políticas, no lo es en absoluto para un discurso que en ningún momento debió ni debe de producirse.

En resumen, sí a la reivindicaciones exigentes, no al maltrato y a la discriminación a esta barriada, y por supuesto que no, no, y no al mensaje de odio, que se está queriendo dar en nombre de muchos vecinos que somos pacíficos aunque exigentes.

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