La nueva flota de autobuses urbanos está en servicio desde este lunes 13 de febrero. Esta era la solución definitiva al problema que estaba sufriendo el transporte urbano de viajeros en los últimos meses, sin embargo se ha dilatado en el tiempo más de lo deseado. Los usuarios se han visto perjudicados durante semanas porque, ante la falta de vehículos, la empresa de transporte suprimió líneas y usó vehículos que no estaban preparados para dar el servicio urbano. Estos no eran accesibles y tampoco disponían de la capacidad suficiente para transportar un volumen importante de viajeros. Los vehículos que hasta ahora estaban en servicio habían presentado en las últimas semanas averías, mermando la capacidad de la empresa Casal, que aún no disponía de autobuses nuevos.

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