Dos años después, Paz y Bien volvió a entregar sus premios por la celebración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad que se conmemora cada 3 de diciembre.

Desde el principio, con el respaldo de autoridades de diferentes instituciones, la jornada se cubrió de un halo de fiesta. Tras la bienvenida por parte del director de centro CaixaForum, Moisé Roiz, y el fundador de Paz y Bien, Rafael Pozo, la irrupción en escena de un timbal hizo conectar directamente con ese último evento celebrado en 2019, dejando claro dónde estábamos y todo lo que había sucedido de por medio. La pandemia había provocado situaciones muy difíciles en los centros en los que viven y conviven personas y el guiño a la situación hizo sentir la fortaleza del ser humano.

Una de Zyrdanza, al compás de esa fuerza que hace salir del miedo, ubicó al personal en el mensaje: aquí no se rinde nadie. Y en con esa firmeza, la entidad se presentó ante el respetable.

Por fin se pudo estrenar el vídeo institucional que conmemoraba los 40 años de la asociación y que se quedó al resguardo de los malos tiempos que llegaron. Por fin, dos años después, se pudo contar esa historia de décadas de trabajo por Andalucía. Por cierto, encantó a todo el público.

Con todo el mundo ubicado en la labor que desarrolla la asociación, hicieron acto de presencia Estefanía Maldonado y Andrés Fernández, presentadores de la gala, quienes con una frescura pasmosa representaron a los profesionales y a las personas usuarias de la entidad.

Las esculturas humanistas, máxima distinción de Paz y Bien, ya estaban en el escenario esperándolos. Los bailarines de Zyrdanza las habían portado desde arriba del auditorio, bajando escalón a escalón al compás de la música, llevando ese objeto en el que se concentra toda la gratitud de una entidad.

La doctora Matilde Blanco abrió este bloque de reconocimientos, los cuartos, que empezaron por premiar la ‘Entrega en el ámbito sanitario’ de esta psiquiatra de referencia para nuestros centros residenciales de Alcalá de Guadaíra y de las enfermeras gestoras de casos quienes, durante la pandemia, se convirtieron en los ángeles de la guarda de nuestros profesionales, Aurora Gutiérrez, del Área de Santiponce, Rosario Cabeza, del Área de Alcalá de Guadaíra, y Antonia Hidalgo, del Área de Cortegana.

El reconocimiento por el ‘Apoyo institucional’ estuvo destinado a Fundación ‘la Caixa’, por los esfuerzos que brinda a nuestra entidad a través de programas de formación y empleo y el fomento de voluntariado con los colectivos más vulnerables.

En ‘Comunicación’ se quiso poner en valor la relación con las cabeceras ‘Diario de Sevilla’, ‘Huelva Información’ y ‘El Día de Córdoba’ reconociendo al Grupo Joly.

Otras de las categorías que se afianzaron fueron la de ‘Trayectoria profesional’, galardón que se entregó a Jesús Gumiel y Carmen Torres, personas con gran recorrido y compromiso en Paz y Bien; la de ‘Superación personal’, destinado al grupo de personas usuarias de los servicios residenciales de la asociación, por la implicación y actitud mostrada desde que comenzara la pandemia por Covid, a pesar de las limitaciones que han sufrido en su día a día.

En la categoría ‘Compromiso social’ fueron varias personas de diferentes ámbitos las que recibieron este galardón. La cantante Rozalén, por hacer su música inclusiva y adaptada a todas las personas; Manuel Contreras Ramos, presidente de Fundación Grupo Azvi, por extender su compromiso al Tercer Sector, especialmente al colectivo de la Infancia; Adela Castaño Diéguez, Teniente de Alcalde del Ayuntamiento de Sevilla y delegada del Área de Igualdad, Educación, Participación Ciudadana y Coordinación de Distritos, por su compromiso con las personas y su plena disposición a ayudar y promover acciones en el Distrito Este-Alcosa-Torreblanca, donde Paz y Bien tiene su sede; y Mercedes López Romero, parlamentaria andaluza y portavoz en la Comisión sobre la Discapacidad en Andalucía, por la sensibilidad y conocimiento que ha mostrado en los últimos años sobre temas sociales, intentando siempre derribar barreras y conseguir la inclusión plena.

Tras la foto de familia, Andrés leyó lo que supone para la vida de las personas con discapacidad intelectual el histórico cambio de la ley civil y procesal que se dio en septiembre de este año, por el que este colectivo dejará de poder ser incapacitado por un juez para pasar a solicitar ayudas puntuales cuando lo necesite.

El grupo Zyrdanza y la actuación final de Miguel Ángel Calero y Salvador terminaron por poner al público en pie en un reencuentro que quedará para el recuerdo.

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