El Pleno fue solicitado para obligar a la alcaldesa a reaccionar frente a la «parálisis».
El pasado 15 de febrero se celebró el debate de la ciudad, en un Pleno extraordinario solicitado por la oposición en bloque para forzar al gobierno de Ana Isabel Jiménez a reaccionar frente a la «parálisis» que ha venido denunciando en las últimas semanas y que se vio intensificada tras el rechazo a la modificación presupuestaria de 3,5 millones de euros. El pleno se cerró con el acuerdo unánime de todos los grupos para la presentación del Presupuesto 2018, la Oferta de Empleo Público de 2017 y la reorganización de los recursos humanos del Ayuntamiento.
El portavoz del Grupo municipal Socialista y delegado de Hacienda, Antonio Gómez Menacho, fue el primero en tomar la palabra y afirmó que «los grupos de la oposición están trasladando una imagen distorsionada y manipulada de la ciudad». En este sentido, afirmó que «están intentando que la gente crea que vivimos en una situación excepcional, cuando todos los indicadores y todos los datos demuestran que la ciudad se encuentra en una fase de recuperación».
Menacho (PSOE): «la oposición traslada una imagen distorsionada de la ciudad»
No obstante, fue la portavoz de Ciudadanos, Rosa Carro, la primera en recordarle que la alcaldesa ha sido «incapaz» de «poner en marcha un Plan Municipal para la ciudad y que ha liderado la cantidad más alta de desahucios y pobreza anclada». Continuó la edil no adscrita Jésica Garrote, que puso de manifiesto «el poco conocimiento que la alcaldesa tiene de la ciudad» y aseguró que «actúa ante las necesidades de su pueblo con políticas de parcheo».
También la portavoz andalucista, Lola Aquino, acusó a la alcaldesa socialista de liderar «un gobierno que no gobierna ni toma decisiones, escudándose en su propia debilidad interna, y pasándole factura a la ciudad».
Aquino (PA): «un gobierno que no gobierna, escudándose en su propia debilidad interna»
María Fernández, portavoz de IU-AA, recordó a Jiménez que «se encuentra más ocupada en dirimir las luchas internas de su partido que de gestionar de forma correcta una ciudad que tiene paralizada, sin proyecto, sin futuro, con un gobierno dividido, sin prioridades y sin capacidad de gestión».
Por su parte, el portavoz de Alcalá Puede, Pedro Nieto, intentó desacreditar a la alcaldesa recordándole las palabras que pronunció en el discurso de investidura, con las que se comprometió hace ya casi dos años, y que «hoy nos hacen comprender a toda la ciudadanía que ha dejado de creer en la política», lamentó.
El edil no adscrito, que recientemente abandonó las filas de IU-AA, Juan Luis Rodríguez, instó al gobierno a «blindar el nivel mínimo y suficiente de bienestar de todos sus vecinos».
La última en tomar la palabra, bien entrada la noche, fue la portavoz del grupo popular, Carmen Rodríguez Hornillo, que aseguró que «la falta de una mayoría absoluta obliga a un gobierno, a hablar, a consensuar, a pactar siempre» y lamentó que «el gobierno no habla ni dialoga, y son los asesores los que imponen».
El Pleno se desarrolló conforme a los esperado, con críticas duras, pero nada novedosas, y en un terreno en el que el gobierno de Ana Isabel Jiménez sabe moverse. De hecho, el portavoz del gobierno contestó a la oposición en el primer discurso sin saber todavía cuáles serían los ataques. El paro, infraestructuras como el nuevo IES o el tranvía, el presupuesto, recursos humanos y la Oferta Pública de Empleo centraron el debate.
Fernández (IU-AA): «Jiménez está más ocupada en dirimir luchas internas que de gestionar»
Hornillo (PP): «el gobierno no habla ni dialoga, son los asesores los que imponen»
El gobierno sacó pecho por las gestiones para la construcción del nuevo IES en Alcalá y la habilitación de la Escuela Infantil El Madroño como edificio puente para el próximo curso. Sin embargo, la portavoz popular Carmen Rodríguez Hornillo recordó que «los incumplimientos en la ejecución de los proyectos están frenando las comunicaciones con nuestro entorno. Solo hay que recordar los ocho años de obras del desdoble de la A-392 o la finalización del Tranvía, una obra que se comenzó en 2009 y aún no sabemos cuándo entrará en funcionamiento».
Gómez Menacho, destacó que «deben seguir mejorando las prestaciones sociales y los servicios a la ciudadanía, en bienestar social, en deporte, en vivienda y en juventud». También, aseguró que tienen que «afrontar la puesta en marcha por los sistemas de gestión directa de los servicios que anteriormente prestaba la sociedad Innovar en Alcalá como son la procesadora, el auditorio, Radio Guadaíra
El edil no adscrito, que recientemente abandonó las filas de IU-AA, Juan Luis Rodríguez, instó al gobierno a «blindar el nivel mínimo y suficiente de bienestar de todos sus vecinos».
La última en tomar la palabra, bien entrada la noche, fue la portavoz del grupo popular, Carmen Rodríguez Hornillo, que aseguró que «la falta de una mayoría absoluta obliga a un gobierno, a hablar, a consensuar, a pactar siempre» y lamentó que «el gobierno no habla ni dialoga, y son los asesores los que imponen».
El Pleno se desarrolló conforme a los esperado, con críticas duras, pero nada novedosas, y en un terreno en el que el gobierno de Ana Isabel Jiménez sabe moverse. De hecho, el portavoz del gobierno contestó a la oposición en el primer discurso sin saber todavía cuáles serían los ataques. El paro, infraestructuras como el nuevo IES o el tranvía, el presupuesto, recursos humanos y la Oferta Pública de Empleo centraron el debate.
El gobierno sacó pecho por las gestiones para la construcción del nuevo IES en Alcalá y la habilitación de la Escuela Infantil El Madroño como edificio puente para el próximo curso. Sin embargo, la portavoz popular Carmen Rodríguez Hornillo recordó que «los incumplimientos en la ejecución de los proyectos están frenando las comunicaciones con nuestro entorno. Solo hay que recordar los ocho años de obras del desdoble de la A-392 o la finalización del Tranvía, una obra que se comenzó en 2009 y aún no sabemos cuándo entrará en funcionamiento».
Gómez Menacho, destacó que «deben seguir mejorando las prestaciones sociales y los servicios a la ciudadanía, en bienestar social, en deporte, en vivienda y en juventud». También, aseguró que tienen que «afrontar la puesta en marcha por los sistemas de gestión directa de los servicios que anteriormente prestaba la sociedad Innovar en Alcalá como son la procesadora, el auditorio, Radio Guadaíra y el Gabinete de Comunicación» y conformar «un frente común para que la Junta de Andalucía siga impulsando el Metro, la Autovía de Dos Hermanas y el nuevo IES».
Rosa Carro, portavoz de Ciudadanos, lamentó que «los polígonos industriales dan pena» y que siendo la reserva industrial de Andalucía «tenemos totalmente abandonados nuestros polígonos industriales. Los empresarios huyen de la localidad por la incertidumbre de la administración». Por su parte, la andalucista Lola Aquino, instó al Gobierno a presentar el Presupuesto 2018 «realista con la situación y fijando con claridad los criterios de gasto e inversión» y criticó que ya van «once ofertas de empleo caducadas, casi un tercio de la plantilla se han incorporado al Ayuntamiento por sentencias judiciales, y existe un completo desorden en las categorías profesionales».
En el mismo sentido, se manifestó María Fernández, portavoz de IU-AA, que acusó a la alcaldesa de «continuista con el régimen implantado por el anterior alcalde, pero sin tener mayoría plenaria» y lamentó «que no apueste por que todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades de acceso a un empleo público y mantenga en sus puestos de trabajo a personas que accedieron a él de forma irregular de la mano de Gutiérrez Limones». El portavoz de Alcalá Puede, recordó que «en septiembre del año pasado dijeron que se les pagaría a los trabajadores en noviembre, y estamos ya en febrero y nada de nada».
Carro (C’S): «los empresarios huyen de la localidad por la incertiumbre de la administración»
Nieto (AP): «la alcaldesa hoy nos hace comprender que ha dejado de creer en la política»
A pocos minutos de las doce de la noche, la alcaldesa puso fin a un debate de casi cuatro horas con el compromiso de sacar adelante el Presupuesto 2018 y la Oferta de Empleo Público, a la que se unió el Gobierno. Un Pleno que fue solicitado para dar el pistoletazo de salida a una campaña de derribo del Gobierno, acabó siendo un conjunto de monólogos políticos, homogéneos y sin fuerza. Los socialistas se sumaron a la petición de la oposición votando a favor de la propuesta.