El gobierno ha anunciado que trabaja en el diseño de un nuevo modelo de gestión para la recogida de residuos y la limpieza viaria en la localidad con el objetivo de mejorar la prestación de dos servicios básicos. En actualidad la gestión de la Mancomunidad de los Alcores «no resulta satisfactoria y genera problemas para los ciudadanos».

Del mismo modo ha explicado que en la actualidad «ni la recogida de la basura ni la limpieza del viario público se realizan en los términos de calidad que requiere una ciudad como Alcalá».Ha insistido en que «existen numerosas deficiencias en el servicio y la respuesta a las demandas y problemas que formula tanto el Ayuntamiento como los ciudadanos se dilatan en el tiempo o no llegan a producirse».

El gobierno afirma que «se está realizando un estudio que ofrecerá un análisis, diagnóstico y propuesta de actuación para mejorar la recogida de la basura y la limpieza de las calles y espacios públicos».

Quejas a la Mancomunidad

El Ayuntamiento ha trasladado las quejas en numerosas ocasiones a la Mancomunidad. La última esta misma semana en un escrito de la alcaldesa, Ana Isabel Jiménez, en el que se dirigía al presidente de la entidad para que diera solución a los problemas que sufre Alcalá en esta materia desde hace ya tiempo.

La intención municipal es dar paso a un nuevo modelo de gestión que mejore el servicio a los ciudadanos y que permita más agilidad al Ayuntamiento a la hora de realizar inversiones en esta materia y también a realizar contrataciones de personal y servicios de refuerzo cuando sea necesario por darse circunstancias especiales.

A pesar de que el gobierno anunció julio de 2019 nuevas transferencias a la Mancomunidad de los Alcores para la compra de nuevos contenedores y vehículos de limpieza, estos no han llegado. Sin embargo, más de un año después, asegura que ha iniciado el proceso de compra de 450 contenedores para sustituir lo que están deteriorados. No obstante, este no es el único problema que presentan los contenedores en Alcalá. Muchos vecinos también se quejan de la ubicación. En la calle Dos de Mayo denuncian que los contenedores están colocados en la fachada, produciendo un deterioro de la misma.

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