Tras las polémicas actuaciones que ha llevado a cabo el consistorio en alrededor de mil árboles de Alcalá, Adelante Alcalá de Guadaíra ha emitido un comunicado en el que condena las “podas brutales que ha sufrido el arbolado urbano” de la ciudad, por las cuales ya se están llevando a cabo “protestas vecinales”.

La formación ha afirmado que exculpan a la empresa “que ha realizado dichas podas, porque son únicamente meros trabajadores que transmiten la incapacidad del gobierno socialista para gestionar las labores de mantenimiento de la ciudad”, añadiendo que “cualquier persona con unos mínimos conocimientos de botánica conoce que los arboles tienen dos picos de máxima savia en el año, una en primavera que incremente el rápido crecimiento y verdor de la planta, y otra en otoño donde se preparan para la hibernación”. Según continúan, las podas realizadas en primavera sobre el arbolado urbano “causan sangrado del árbol, es decir, pérdidas abundantes de savia y con ello sufrimiento del árbol”, consiguiendo también “aumentar la propensión a enfermedades, plagas y hongos”.

Desde Adelante Alcalá de Guadaíra han acusado a la alcaldesa, Ana Isabel Jiménez, de “incapacidad” para “realizar las más mínimas tareas de mantenimiento de conservación de la ciudad” y han remarcado el compromiso de Adelante con el “entorno urbanístico”, mediante la implantación de la Agenda 2030.

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