La socialista se presentó como candidata arropada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ante unas de 300 personas.El PSOE presentó este viernes a la candidata a la Alcaldía y actual regidora, Ana Isabel Jiménez, en el hotel Sandra ante un aforo de unas 300 personas en el que Jiménez estuvo arropada por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero y la líder de los socialistas sevillanos, Verónica Pérez.
En el acto se presentó también al resto de candidatos socialistas a las elecciones municipales del 26 de mayo, y que acompañarán a Jimenez.
La primera en tomar el turno de palabra fue Pérez, para quien Jiménez es «un referente en igualdad para todos los socialistas sevillanos», por haber sido investida «en pantalones», rompiendo así con las reglas. Es más, llegó a comparar a la alcaldesa con Susana Díaz, por ser «políticas de raza». «El 2 de diciembre aprendimos una lección, no basta con ganar, hay que ganar bien», porque «de lo contrario hay otros que nos llevan cuarenta años atrás», en alusión a PP, Ciudadanos y Vox.
La más aplaudida, sin embargo, fue la intervención de María Jesús Montero. En ella habló de que Alcalá como «una incubadora de empresas y un ejemplo de política social». No obstante, la mayor parte del tiempo se centró en las elecciones generales del 28 de abril, en la que Montero es cabeza de lista al Congreso por Sevilla. «Los socialistas son la garantía de la unidad de España», expresó.
La ministra defendió la eutanasia, el feminismo, las medidas ante el cambio climático y el sistema andaluz de matrículas universitarias, un modelo que quiere expandir a nivel nacional. Además, mostró su preocupación ante el acercamiento de PP y Ciudadanos hacia Vox.
Jiménez: «Alcalá es socialista»
En cuanto al discurso de Jiménez, la alcaldesa comenzó con un mensaje de gratitud con los representantes de UGT, al exalcalde Manuel Hermosín y al expresidente del PSOE local Bernabé Gámez, presentes en el acto. Posteriormente declaró que los socialistas «tenemos una espinita clavada desde las elecciones andaluzas, pero nos la quitaremos porque Alcalá es socialista».
En relación a sus propuestas, Jiménez afirmó que «la prioridad número uno es el empleo, en los dos último años 2.189 personas han conseguido un puesto de trabajo en Alcalá». En la misma línea, habló del cierre de Eroski, ante el cual ya hay un nuevo proyecto que es «más ambicioso y que generará muchos más puestos de trabajo».
Por otro lado, mostró su satisfacción por haber reducido la deuda pendiente en un 52% en los últimos tres años y por estar fuera del Plan de Ajuste. En último lugar, Jiménez animó al voto alegando que «las tres derechas están intentando embarrar el ambiente. Cuando los socialistas votan, la derecha tiembla, que nadie se quede en casa».