El Gobierno municipal ha trabajando con la Asociación de Vecinos para que la zona no se considere geográficamente aislada y se eviten desplazamientos a la Oficina de Correos, siendo los informes municipales determinantes para esta decisión estatal
El Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra ha mostrado su satisfacción por la decisión estatal de que la Urbanización La Pirotecnia pueda contar con servicio de correo ordinario en los buzones particulares de las viviendas, medida en la que el Equipo de Gobierno junto a la Asociación de Vecinos llevan trabajando meses para que así se reconociese y evitar los continuos traslados de los residentes a la oficina de correos, según informa el consistorio.
La teniente alcalde delegada de Desarrollo y Participación Ciudadana, Rocío Bastida, ha puntualizado que “el Gobierno Local ha enfatizado en los informes que ‘la Urbanización La Pirotecnia se encuentra recepcionada y conectada al núcleo urbano de Alcalá a través de la Urbanización Pinares de Oromana’”. Además, los vecinos de esta zona contigua sí reciben domiliciariamente sus envíos, por lo que se evita una situación discriminatoria en igualdad de condiciones.
En este sentido, junto a los datos de población y volumen de envío postales, los informes municipales se han valorado como determinantes y concluyentes para que La Pirotecnia no se considere una zona geográfica aislada o entorno especial por la que sus habitantes tengan que recibir la correspondencia desplazándose a la oficina de Correos, ni a través de casilleros concertados pluridomiciliados como establecen los reglamentos pertinentes en estos casos.
“Es una gran noticia para los residentes de esta urbanización porque se trata de un pronunciamiento de ejecución prácticamente inmediata”, señalan desde el Ayuntamiento. De hecho, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, organismo encargado de esta decisión, ha dado trámite a la Sociedad Estatal de Correos para que en el plazo “más breve posible”, en ningún caso superior a los diez días, se inicie la entrega de los envíos postales ordinarios en dicha urbanización, garantizándose al igual que en el resto del núcleo urbnano, al menos cinco días a la semana en los buzones o casilleros en cada una de las viviendas.