En el Día Internacional del Animal Sin Hogar, las diversas asociaciones y protectoras de animales en España calculan que anualmente se abandonan 300.000 animales domésticos en nuestro país. Una realidad que parece haberse agravado con el COVID-19, periodo en el que la demanda de la compañía casera de mascotas subió como la espuma, especialmente en la época del confinamiento más estricto, pero que ahora, al igual que las restricciones, ha disminuido sensiblemente con el consiguiente olvido de los animales que un día se consideraron compañeros de vida.

Estrella, miembro del Centro de Recuperación de Especies Arca de Noé en Sevilla sostiene que la irresponsabilidad alcanza cuotas inimaginables. En su entidad sin ánimo de lucro recogen perros, gatos, tortugas, cobayas y equinos, estos últimos incorporados recientemente a sus cuidados por la baja sensibilidad poblacional hacia sus cuidados, y asegura que con el COVID-19 las renuncias de los dueños de muchas mascotas domésticas se ha agravado con creces, con respecto a los “periodos vacacionales a los que estamos tristemente acostumbrados”.

En el Arca de Noé han experimentado en primera persona el fenómeno del antes y el después del periodo más severo de la pandemia de la COVID-19 con las mascotas. “Ha sido mucho peor que los típicos veranos, nos hemos lanzado a buscar cariño y compañía y, una vez que se abrieron las compuertas hacia la normalidad, también lo hacían las de las casas con sus mascotas. El abandono se ha triplicado desde marzo el pasado 2020”.

Estrella hace hincapié en que la recuperación de los animales domésticos provenientes de familias es mucho más dura y complicada que la de los animales callejeros ya que los primeros “sufren una dejadez, pierden la autoestima y se vuelven inseguros, incluso agresivos cambiando su comportamiento inicial por completo”.

Para “curar esas lesiones psicológicas y conseguir que recuperen la confianza en sí mismos nosotros jamás los tenemos en jaulas y trabajamos con ellos y su socialización durante seis meses”, indica Estrella.

En el caso del Arca de Noé, reciben una media de 14 peticiones de “depósito” al día, algo inasumible, lo que provoca que la espera por parte de las familias sea impaciente y muchas veces el destino de esas mascotas acabe en perreras y en sacrificio.

Parejas jóvenes con hijos pequeños

Éste es el perfil más frecuente de los usuarios del Arca de Noé, parejas jóvenes que tienen hijos de poca edad cuyas complicaciones funcionales descartan de la ecuación a las mascotas. Los dueños más estables suelen ser de mediana edad con hijos de entre 18 y 25 años ya con tareas y responsabilidades repartidas.

Tortugas, tendencia invasora

Otra de las últimas tendencias que ponen de relieve desde el Arca de Noé es la adquisición de tortugas chinas cuyos cuidados se desconocen y, al ser abandonados en ríos andaluces se están convirtiendo en una especie invasora que está desplazando la autóctona de aquí. “Apelamos a la concienciación de la población y a que ésta se informe previamente a la adquisición de estos reptiles”.

En lo referente a la campaña de la Junta de Andalucía #NoEsSoloComidayAgua Estrella comenta que es “un buen paso hacia la toma de conciencia, pero aún insuficiente”. Sevilla Actualidad ha podido comprobar que aún estamos muy lejos del nivel de los cuidados de lugares como Escocia donde, el abandono anual de mascotas no supera la decena. ¿Y aún se les llama los “bárbaros del norte”?. Suyas las conclusiones.

Plumilla por vocación, he trabajado en radio, televisión y prensa on line. Profundamente europeísta y convencida de que el Periodismo es el motor de cambio de la sociedad y hay que salvaguardarlo. Para...

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