María Jesús Montero / Moncloa

Este martes, el Consejo de Ministros se ha reunido para mantener la decisión sobre el fin del estado de alarma el próximo 9 de mayo. De esta manera, las nuevas medidas vendrán de la mano de las Comunidades Autónomas y del Tribunal Supremo.

El Consejo ha aprobado un real decreto en el que se tras la finalización del estado de alarma, se podrán mantener algunas de las medidas sujetas a la vigencia del estado de alarma como escudo social.

Además, incluye la posibilidad de que las Comunidades Autónomas mantengan y propongan medidas que afecten a los derechos fundamentales siempre y cuando el Tribunal Supremo lo autorice.

A pesar de que el Gobierno ya ha asegurado en varias ocasiones que el toque de queda solo podrá mantenerse con el estado de alarma, muchas comunidades quieren prorrogarlo. Este es el caso de la Comunidad Valenciana que está preparada para solicitarlo.

El TSJ tendrá la última palabra

Calvo asegura que  “es evidente que un toque de queda generalizado como el que tenemos todavía hoy, hasta el 9 de mayo, solo lo podíamos hacer en todo el territorio mediante el estado de alarma. Y es evidente que las comunidades autónomas pueden justificar, argumentar, proponer y decidir situaciones como el toque de queda o los confinamientos, claro que lo pueden hacer, pero están sometidas como es lógico a la autorización judicial correspondiente”

De esta forma, la ministra declara que ya no es razonable tomar decisiones “tan drásticas” para todos por igual. Por tanto, el Gobierno ofrecerá la posibilidad a las comunidades de tomar sus propias medidas y decisiones.

Asimismo, las autonomías podrán decidir y solicitar toques de queda nocturnos, cierre perimetrales, entre otras, pero siempre bajo la supervisión del TSJ, que considere acordes las medidas con la situación. Por tanto, la Sala Tercera del Tribunal Supremo dictará “la última palabra” sobre estas restricciones autonómicas en un plazo de cinco días.

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