CSIF Sevilla ha denunciado que la dirección del Hospital de Valme de Sevilla pretende que el personal “se lleve sus uniformes para lavarlos en casa en plena alarma sanitaria por el COVID-19”.

La Central Sindical ha informado de que hace días pidió que se adquiriesen pijamas desechables para los trabajadores y, de alguna manera, minimizar el posible riesgo de contagio al manipularlos tras su uso; sin embargo, “el equipo directivo no ha tomado en consideración tal petición y ha dado orden de que a partir del 6 de abril todos los pijamas que utilizan los trabajadores pasen de ser nominativos (cada profesional los adecua a sus medidas personales) a una bolsa general”, denuncian.

En un comunicado emitido explican que el personal manifiesta sus quejas por la decisión adoptada pues, “cuando los empleados soliciten uniformes, se les asignará uno cualquiera de tallas predeterminadas, que pueden no coincidir con las propias y, por tanto, dificultando su trabajo”. “Asimismo, esto se puede agravar al utilizar algún tipo de equipo de protección individual (EPI), que siguen escaseando para el personal en primera línea frente al COVID-19”, relatan.

CSIF Sevilla ha recordado que ya denunció que la centralización de la lavandería en el Hospital Virgen del Rocío no sería operativa y ahora ha manifestado su preocupación por que la dirección pretenda hacer desaparecer también la lencería del Hospital de Valme. La nueva orden de la dirección afectará a todos los trabajadores, que denuncian que se les ha insinuado que quiten cualquier personalización en el uniforme.

Por último, CSIF Sevilla ha manifestado su intención de que la medida no se lleve a cabo y ha recomendado a los profesionales que, en ningún caso, se lleven los pijamas a casa debido al alto riesgo de contagio que existe.

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